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por Peter Kirn

Así se hizo MASCHINE+

Nos metimos debajo de la piel de nuestro groovebox independiente con las personas que lo hicieron posible.

Lo que no puedes ver de MASCHINE+ es lo que lo hace diferente. Puedes olvidar la computadora que usualmente tienes que conectar, por supuesto, pero debajo de esa capa externa conocida se encuentran muchos detalles menos obvios de hardware y software que se integran para lograr que la experiencia independiente funcione. Aquí, analizaremos a profundidad algunos de esos detalles cruciales y abordaremos algunas preguntas que pudieras tener sobre MASCHINE+. Por ejemplo, ¿qué se necesitó para producir el primer producto independiente de Native Instruments y qué significa para el futuro de NI?

Para ayudarnos a obtener algunas respuestas, hablé con el equipo que colaboró para llevar a MASCHINE+ al mercado, comenzando con el gerente de productos de hardware, Chris La Pietra.

Describir qué hace que el ‘flujo’ de un instrumento musical convencional funcione es fácil, explica. No se trata de mirar pantallas: se trata de memoria muscular y emoción. El tipo de sensación que obtendrías, digamos, de una guitarra, es precisamente lo que MASCHINE siempre ha intentado fusionar con el poder y la flexibilidad de las computadoras. Con esta primera iteración independiente, el equipo apuntó a exprimir ese enfoque de lo mejor de ambos mundos en un solo dispositivo.

El objetivo, dice Chris, es que cualquiera, desde bandas en vivo hasta músicos de estudio sin DAW, puedan estar ‘completamente libres de computadora’ y enfocarse únicamente en su instrumento.

“Puedes desarrollar la memoria muscular para tocarlo con los ojos cerrados, simplemente accediendo a todo con la punta de los dedos. Combina eso con los instrumentos, los efectos y las expansiones de KOMPLETE y obtendrás algo realmente especial”.

La empresa tiene sus raíces en esta idea de cómo una plataforma digital se puede convertir en un instrumento: es, literalmente, “nativo” de Native Instruments. NI es, ante todo, una empresa de software, y eso es evidente en todo este nuevo instrumento. En esencia, MASCHINE+ sigue siendo una herramienta basada en software. Pero el software MASCHINE que conoces se ejecuta en una computadora, ¿qué se tuvo que cambiar para dar el salto hacia hardware independiente? En resumen, todo: no sólo la herramienta en sí, sino toda la empresa alrededor a esta.

“Es una locura, la cantidad de cosas que suceden”, dice Mario Altvater, líder de diseño de experiencia de usuario del equipo. “Tantos departamentos, tanta gente que tuvo que comprometerse. Significaba planificar desde una nueva dimensión”.

“Hubo muchas personas involucradas”, coincide Mariana Borssatto, líder de proyecto de MASCHINE+. “Y tuvimos que ser realistas: ‘¿Cuál es la cantidad de trabajo necesaria para llevar el proyecto a la meta?’”. Habla con entusiasmo sobre los pasos finales que siguió el equipo para pasar del prototipo al producto final; la cantidad de atención que abarcó todos los detalles que el usuario ve desde el momento en que lo enciende por primera vez.

El científico informático Alan Kay, dijo que las personas que se toman en serio el software deberían fabricar su propio hardware, o al menos Steve Jobs lo citó así. Pero, ¿qué se necesita para que ese hardware funcione? La mejor persona para responder es el obsesivo ingeniero mecánico senior de NI, Igor Vargotsky.

Parte del trabajo de Igor es quitarle calor al producto, literalmente. El corazón de MASCHINE+ es un procesador Intel, y la arquitectura que lo rodea está diseñada en consecuencia. “Este CPU específico tiene un bajo consumo de energía: 14 vatios”, dice Igor. “Así que estaba claro desde el principio que no necesitaríamos un enfriamiento activo complejo: ventiladores, tuberías, etcétera”.

El Mk3, del que MASCHINE+ toma su forma, ya tenía como base una placa de metal e Igor se dio cuenta de que sería perfecta para disipar el calor. El siguiente paso fue, simplemente, agregar material que conduciría el calor desde el paquete del CPU a esa placa base. Después de analizar datos de varios materiales bajo carga térmica, el equipo se decidió por un bloque mecánico de aluminio.

Dado el factor de forma compartido de los dos instrumentos y los componentes adicionales que se necesitaban para la funcionalidad independiente, estaba claro que los ingenieros eléctricos y de plataforma de NI tendrían que utilizar toda su creatividad para ensamblar todo en MASCHINE+. El equipo se basó en la base arquitectónica del instrumento desde el principio, creando el resto del diseño en torno a eso. “Pudimos introducir todo en la carcasa, en gran parte gracias al brillante diseño de la distribución del circuito impreso de los ingenieros eléctricos”, dice Igor.

Sin embargo, no se trataba simplemente de meter un cerebro en el Mk3; cada detalle del hardware requería una nueva ronda de rigurosas pruebas e ingeniería mecánica. “Se trabajó bastante para garantizar la calidad del hardware con el fin de mejorar el rendimiento de los controles giratorios”, cita Igor sólo como un ejemplo. “Eso significó muchos intercambios entre proveedores y pruebas de usuarios”.

El diseñador industrial senior, Johannes Schroth, reflexiona que incluso la decisión de conservar el factor de forma del Mk3 en sí mismo fue fruto de la reflexión. “Tiene un tamaño perfectamente ergonómico”, dice. “Está probado y probado. Y ya tenemos todos los flujos de trabajo desarrollados para ello, aunque, obviamente, habrá más por venir”.

“Probamos mucho la computadora fuera de la unidad”, dice Johannes. “Pero lo que realmente habla de la calidad de nuestro diseño es que, cuando están bajo carga, las computadoras en realidad funcionan mucho mejor dentro de MASCHINE+ debido a ese enorme disipador de calor”.

Entonces, ¿todo ese calor del CPU se traduce en una placa de base caliente? Bueno, si planeas usarlo para calentar tu regazo en un estudio sin calefacción, piénsalo de nuevo. “Nunca hay más de 10 ºC (18 ºF) que la temperatura ambiente”, explica Johannes.

“Para nosotros era importante destacar que éste no es un Mk3. Es una bestia diferente, un producto más premium”, dice Johannes. “Así que, en realidad, nos centramos en los detalles. Las perillas de acero moleteadas se sienten geniales y se ven increíbles. La placa superior forma un sándwich muy agradable con la hoja inferior altamente funcional. Las islas de botones crean una gran agrupación visible y la pantalla también funciona muy bien como isla. Me gusta mucho el marco continuo que se formó alrededor de los grupos de interfaces. Además, la mezcla de materiales que está presente en la carcasa (metal, plástico, metal) es justo lo que encontrarás en las perillas. Puedes ver eso con más claridad en el encoder 4D.

“Usamos una combinación de procesos modernos y tradicionales para el acabado de la superficie”, dice, refiriéndose al trabajo en detalle que se realizó en la estética del instrumento. “Usamos deposición física de vapor para los plásticos y anodizamos las partes de aluminio, lo que significó trabajar a través de innumerables iteraciones para llegar al color correcto. También agregamos bonitos chaflanes en los bordes de todas las piezas metálicas para obtener un reflejo de borde adecuado, y agregamos una agradable textura hilada en la parte superior de los ocho potenciómetros giratorios infinitos. Todos estos pequeños detalles son los que realmente marcan la diferencia.

“Tenemos un equipo de desarrollo de hardware excelente y experimentado que está a la altura de cualquier desafío”, dice Johannes. “Confiamos en las capacidades de los demás y seguimos aprendiendo de nuestros colegas a medida que avanza el viaje”.

Además de desarrollar nuevo hardware, dar vida a MASCHINE+ también significó refinar el software existente de NI para que se ejecutara en la nueva arquitectura y adaptarlo a su propio sistema operativo personalizado basado en Linux.

Vincenzo Pacella es ingeniero principal del software de MASCHINE+. Él dice que el proyecto presentó desafíos en dos áreas: elegir y adaptar un sistema operativo, y adaptar aplicaciones, instrumentos y efectos para que se ejecutaran en este entorno por primera vez. Linux fue la elección obvia, dice, reforzada por cadenas de herramientas que ayudan a crear imágenes de SO personalizadas (hasta servicios y aplicaciones).

El uso de librerías internas, compartidas por parte de NI, facilitó la transferencia de complementos al nuevo hardware junto con el software MASCHINE. Pero el equipo aún tenía mucho trabajo por hacer, como explica Vincenzo: “Además de portar las librerías existentes, tuvimos que diseñar e implementar un conjunto de nuevas librerías y microservicios que interactúan con la aplicación principal y brindan ambas funciones orientadas al usuario: conectarse a redes WiFi; descarga, instalación y activación de productos; manejo de dispositivos de almacenamiento externos, etc., y funciones internas, como recuperación de errores, registro e informes de fallas”.

La seguridad también fue una prioridad desde un inicio, dice, incluido el fortalecimiento del sistema operativo, los servicios y las aplicaciones.

Todo lo relacionado al software de MASCHINE+ se ha ajustado de antemano para que funcione sin problemas con el hardware.

La decisión de usar Linux llegó, incluso, antes de elegir el CPU: el equipo ejecutó puntos de referencia en plataformas diferentes antes de decidirse por Intel Atom, basándose en una combinación de rendimiento bruto y otros elementos, como el comportamiento térmico y la disponibilidad a largo plazo. El sistema operativo de NI, sin embargo, no es exactamente lo que pensarías cuando imaginas a Linux.

“El sistema operativo está diseñado para este hardware específico y sólo ejecuta un conjunto mínimo de servicios que utiliza la aplicación principal”, dice Vincenzo. “Ésa es la razón principal por la que no se pueden comparar directamente las especificaciones de MASCHINE+ con computadoras portátiles o de escritorio”.

Como se mencionó, todo lo relacionado al software de MASCHINE+ se ha ajustado de antemano para que funcione sin problemas con el hardware. Entre otras cosas, significa que requiere menos memoria integrada que una computadora de escritorio para lograr un nivel similar de rendimiento. Sin embargo, esto no quiere decir que el equipo no trabaje de manera ardua para explotar aún más el rendimiento. “Ha habido un gran esfuerzo para optimizar la manera en que se utilizan los recursos del sistema”, me dice Vincenzo. “Especialmente en términos de CPU, RAM y E/S de disco, y continuaremos por este camino para futuras actualizaciones”.

Ese proceso de afinación continuo es parte de la razón por la que no se pueden ejecutar todos los instrumentos o efectos de KOMPLETE en MASCHINE+. Pero ya incluye decenas de estos elementos. Incluso hay soporte no oficial para usuarios valientes con una licencia de REAKTOR que quieran experimentar usando sus propios ensambles en el dispositivo, por ejemplo. Eso es algo que no se puede hacer en ningún otro dispositivo independiente (a menos que crees el tuyo); permite hacks y mods únicos para usuarios avanzados.

Eso significa que MASCHINE+ es algo nuevo.

“Puedes ver a MASCHINE+ como un subconjunto seleccionado de las características que están disponibles en las computadoras de escritorio modernas”, dice Vincenzo. “Esto nunca sustituirá a tu computadora de escritorio, especialmente si tu flujo de trabajo necesita cientos de complementos diferentes, sino más bien es una herramienta creativa con una selección limitada, curada y ‘saludable’ de complementos y sonidos que te mantendrá en el flow creativo”.

Terminar MASCHINE+ ha consistido en reunir todas estas partes móviles: sistema operativo, ingeniería mecánica y eléctrica, software, voz, lo que sucede desde que abres la caja y la enciendes; luego, optimización, optimización, optimización y más optimización. Pero, como enfatiza todo el equipo, este proceso apenas está comenzando.

Incluso los detalles de cómo se conecta a Internet y obtiene música requieren que todo NI trabaje en conjunto. Y eso significa que aun si usas un producto MASCHINE o KOMPLETE diferente, podrás obtener algunos de los beneficios del trabajo de integración que se han realizado para hacer posible MASCHINE+.

“Seguirás viendo un enfoque sinérgico para el desarrollo de productos, incluso más que en el pasado”, dice Chris. Esto parece evidenciado por el hecho de que MASCHINE y KOMPLETE KONTROL ahora se han unido como un solo departamento de Producción Musical, dirigido por Tim Adnitt, de NI. El objetivo principal de este cambio es compartir tecnología para permitir instrumentos más inmersivos e integrados en el futuro. Y eso significa que, ya sea que se necesiten pads o teclas, todo depende de ti como usuario.

Entonces, cuando enciendas un dispositivo o gires una perilla, piensa en el hecho de que sólo gracias a los esfuerzos combinados de muchas personas durante muchos años es posible que todo funcione en conjunto. U olvídate de eso y simplemente disfruta de la fluidez.

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